Con el apoyo de Santana, Buenaventura Báez, Presidente de la República
SANTO DOMINGO, RD.- El 5 de agosto de 1849, se hizo efectiva la convocatoria que hizo el Congreso Nacional para escoger ese día el nuevo Presidente de la República. El ganador fue Buenaventura Báez, quien se desempeñaba como presidente del Congreso Nacional.
Luego de la caída del Presidente Manuel Jimenes, el 29 de mayo de 1849, las del 5 de agosto fueron las segundas elecciones convocadas por la voluntad del encargado del Poder Ejecutivo, general Pedro Santana.
En las primeras celebradas el 5 de julio de 1849, fue electo Presidente el ciudadano Santiago Espaillat, quien declinó.
Las elecciones del 5 de agosto habían sido convocadas por el General Pedro Santana, quien encabezó una revuelta armada que obligó al Presidente Manuel Jimenes a entregar el poder el 29 de mayo de 1849.
A partir del 30 de Mayo de 1849 Pedro Santana tomó el Poder Ejecutivo.
En las elecciones iniciadas el 5 de julio de 1849, fue electo Presidente de la República, Buenaventura Báez, quien se desempeñaba como presidente del Congreso Nacional.
La candidatura de Buenaventura Báez, quien contribuyó a la caída del Presidente Manuel Jimenes, era promovida por el general Pedro Santana.
En efecto el proceso culminó con el triunfo de su candidatura el día 18 de agosto de 1849.
Cuando Santiago Espaillat fue electo Presidente el 5 de julio, alegó para no asumir la jefatura del Estado, razones de edad y salud.
El ciudadano Santiago Espaillat había sido escogido para el cargo por el encargado del Poder Ejecutivo, general Pedro Santana. El historiador Frank Moya Pons, en su obra Manual de Historia Dominicana, expresa el criterio de que declinó la Presidencia a conciencia de que si no lo hacía, se convertiría en un títere del Jefe del Ejército.
Ante esa situación, el Congreso convocó a nuevas elecciones para el 5 de agosto de 1849.
Cuando Pedro Santana se hizo cargo del Poder Ejecutivo el 30 de mayo de 1849, proclamó que lo hizo «por mandato de los pueblos y el Ejército».
Durante ese período desató una campaña de represión contra sus adversarios. Algunos pudieron salir al exilio.
En las decisiones el autoritarismo de Pedro Santana fue evidente.
Por Héctor Tineo N
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